Cuando hablamos de los sustantivos tenemos que tener en cuenta que podemos distinguirlos y clasificarlos de diferentes maneras en función de sus características: propios y comunes, sustantivos individuales y colectivos, concretos y abstractos, colectivos e individuales, y contables e incontables. En este caso vamos a hablarte en profundidad de los sustantivos contables.
¿Qué son los sustantivos contables?
En gramática, cuando distinguimos entre sustantivos contables e incontables, lo que estamos haciendo es establecer dos categorías de palabras en función de la capacidad de los mismos al hacer referencia a objetos que se pueden enumerar o no.
De esta forma, los sustantivos contables son aquellos sustantivos que hacen alusión a unidades separables, es decir, que se pueden contar en unidades. Se trata de entidades que se pueden contar y que son fáciles de concebir de una manera aislada, y a las cuáles podemos hacer referencia detallando el número exacto de ellas. Habitualmente están combinados con adjetivos numerales sin que haya que modificarlos a nivel semántico. Por ejemplo: cuatro perros, diez coches, una libreta.
Los sustantivos numerables son una categoría que pertenece a los sustantivos comunes, que identifican de forma general a la clase que pertenece aquello que se nombra. Se usan para identificar o nombrar a cualquier ser, ya sea persona o animal, sentimiento, emoción u objeto. Por ejemplo: alegría, tiempo, coche, perro.
Los sustantivos contables pueden expresarse en singular, si se refieren a un elemento, o en plural, si hacen referencia a más de uno. Por ejemplo: niña/niñas, gato/gatos.
Asimismo, hay que tener en cuenta que a este tipo de sustantivos también se los conoce como nombres discretos o nombres discontinuos. Para diferenciarlos de los incontables, lo que debes haceres pensar si la realidad que deseamos nombrar se entiende como algo concreto, individual y que se puede medir y delimitar. En caso afirmativo, nos encontraremos con un caso de sustantivo contable.
Esto es válido para la lengua española, ya que en cada lengua alrededor del mundo hay características quelas definen que son diferentes, y un sustantivo que puede ser contable en una lengua, puede ser incontable en otro idioma diferente.
Diferencia con los sustantivos incontables
Los sustantivos incontables, a diferencia de los contables o numerales, son aquellos que no es posible contarlas como unidades. Se pueden contar cuando se unen a otras categorías que sí se pueden contar. Por ejemplo: un vaso de agua, donde vaso es contable y agua incontable.
Estos sustantivos no contables, solo se pueden combinar con cuantificadores en singular, y admiten numerales cardinales cuando indican una clase. En este caso, los sustantivos incontables se usan para hacer referencia a objetos difíciles de precisar en unidades separadas, a los que habitualmente se hace referencia e conjunto, de manera indeterminada e imprecisa, en ocasiones porque no tiene sentido su enumeración.
Por otro lado, hay que tener en cuenta que en algunas ocasiones, los nombres incontables sí permiten usar la forma plural, pero en ese tipo de ocasiones se recategorizan para ser considerados contables. Un claro ejemplo es el agua – las aguas, ya que aunque no podemos decir que «compré tres aguas», y lo correcto sería «compré tres botellas de agua», sí que podemos hablar de las aguas al referirnos, por ejemplo, a los diferentes tipos de agua que puede haber (agua salada, agua dulce…).
Ejemplos de sustantivos contables
A la hora de enumerar a sustantivos contables podemos hacer referencia a una gran cantidad de ellos, ya que en nuestro día hacemos una referencia constante a ellos, tanto a la hora de comprar como en otros aspectos de nuestro día a día. No obstante, para que puedas entender mejor cuáles son e identificarlos de una manera apropiada, te dejamos con algunos ejemplos:
- Camión
- Coche
- Televisor
- Lápiz
- Perro
- Sapo
- Tarro
- Taza
- Caja
- Casa
- León
- Puerta
- Cojín
- Sudadera
- Camiseta
- Mesa
- Maletín
- Teléfono
- Uva
- Caja
Ejemplos de oraciones con sustantivos contables
Una vez vistos algunos ejemplos de sustantivos contables que puedes utilizar a la hora de crear tus oraciones en el idioma español, te dejamos una serie de oraciones en las que hacemos uso de los mismos, de manera que conozcas de una manera oportuna su aplicación en la escritura o habla en español:
- Los platos se encuentran almacenados en el armario.
- Tengo que llenar cuatro botellas de agua para llevárselas a mi primo.
- En la clase de música nos enseñaron a tocar la flauta y el violín.
- Tengo que ir a la tienda para comprarme un par de camisetas y alguna sudadera.
- En la nevera tengo guardados los yogures que me mandaste comprar.
- Tengo que ir a casa de mis abuelos para llevarles el regalo que me dio mi tía para ellos.
- Me encantaron los pendientes que vi en la tienda que está al lado del ayuntamiento.
- Cuando fui al zoológico me impactaron mucho las jirafas.
- Antes nos llegaban muchas cartas a casa, pero ahora lo envían todo por correo electrónico.
- Tengo que comprar una nueva impresora para poder imprimir las hojas más rápido.